Implementamos tecnologías de valorización de residuos orgánicos para la formulación de biofertilizantes de uso agrícola.
En Chile en el 2017 se quemaron 230 mil hectáreas de residuos agrícolas y rastrojos. Esta forma de descartar los residuos genera gases de efecto invernadero que contribuyen al cambio climático y desperdicia una valiosa fuente de bioestimulantes agrícolas, productos con aplicaciones tan variadas como abonos o biofertilizantes, así como tratamientos foliares, de semillas y de suelos.
Se espera que con el aumento en el consumo de bioestimulantes el tamaño del mercado mundial de bioestimulantes en 2030 alcance los US$4.600 millones, según el informe 2023 de Grand View Research, Inc.
Al identificar e inocular microorganismos benéficos especializados en la degradación de residuos orgánicos, como restos de podas, cultivos o alimentos procesados, lodos residuales o purines de ganado, es posible producir en solo 15 a 21 días un abono agrícola fermentado con características de compost clase A. Esto representa una reducción significativa de los 21 a 30 días que tarda el bokashi tradicional y los 3 a 6 meses del compostaje.
Además de enriquecer los suelos de cultivo los bioestimulantes agrícolas pueden aumentar la capacidad de la planta de absorber nutrientes y otorgarle resiliencia al estrés abiótico, incluyendo factores asociados al cambio climático, como escasez hídrica, altas temperaturas y salinidad.
Al inocular a los residuos microorganismos especializados se obtienen bioestimulantes de rápida producción que, además de reducir el volumen y costos asociados al desecho de residuos, aportan nutrientes y microorganismos beneficiosos a suelos de cultivo.
Andrés Arroyo
Líder de línea de I +D Valorización de residuos
Programa Agrosimbiosis
Conoce el proceso que realiza Agrosimbiosis para convertir residuos en abono agrícola
Andrés Arroyo, líder de línea de I +D de Valorización de Residuos:
Implementamos tecnologías de valorización de residuos orgánicos para la formulación de biofertilizantes como alternativa para reducir su impacto medioambiental, aumentar la rentabilidad de los negocios y mejorar el impacto social.
Podemos generar la valorización de residuos agroindustriales que en este momento implican un costo de tratamiento o disposición para la empresa, diagnosticar los puntos críticos ambientales asociados a la cadena productiva de la empresa o a la implementación de la tecnología, si la empresa lo desea, y mejorar la producción de cultivos con la aplicación de los bioestimulantes.
Hoy muchas empresas agroindustriales están teniendo gastos asociados a la disposición de residuos o los venden a muy bajo precio. Agrosimbiosis les permite generar beneficios económicos y emitir menos contaminantes. Además, tendrán la oportunidad de generar enlaces con empresas que estén interesadas en adquirir los productos generados a partir de los residuos.
Empleamos la tecnología de compost acelerado o abono fermentado para mejorar la productividad de las empresas agrícolas y además valorizar sus residuos. Aplicamos procesos de bioprospección dirigida a la selección de microorganismos que potencien la tecnología de compostaje o abono fermentado y mejoren las características del bioestimulante. Además, utilizaremos la metodología de Análisis de Ciclo de Vida para evaluar el impacto ambiental y de circularidad del proceso productivo de la empresa.
Las empresas de la agroindustria asociadas generan residuos que serán convertidos en bioproductos o bioestimulantes. Estos últimos mejoran los suelos y un enfoque sistémico hace que utilicemos los residuos de la producción como nueva materia prima, generando un círculo virtuoso.